El Cielo en el Dharma, El Infierno en el Karma
Desde hace algún tiempo suena dentro mi Soundtrack Subliminal una canción cuya letra arroja la siguiente frase: perdí el amor del cielo sobre mí / elegí la lujuria de la tierra sobre la que me encuentro... Dejando a un lado el sentido religioso de la letra, actualmente no permito que, desde hace cerca de un mes, se me olvide qué tan fácil se pierde la tranquilidad emocional por la estabilidad física... y es que los muros de idealismo y orgullo que a través de años y años de autoformación nos construímos, pueden soportar embates de terceros, pero suelen derribarse demasiado fácil cuando tú mísmo traicionas los cimientos de tus murallas... Y es que caer en los vicios del mundo que te rodea, de ese mismo mundo que has jurado abandonar a la primera oportunidad, del que juraste no dejar infectar tus principios, suele ser un golpe del que, seguramente te levantarás, pero tendrás que seguir tu camino cojeando. Como sicario con la gracia y facilidad de retorcer el camino propio y de extraños..