El Equilibrista (el fin del 2008)
Ooh sí.. hago una pausa entre toda la pachanga para dejar un mensajito por acá (la verdad es que traigo la pachanga desde ayer, y tras 10 horas de alcoholizarme casi voy despertando jejeje... en fin)
Año tras año desde que abrí este espacio virtual, parece inevitable que cada post de fin de año tenga la frase "lo mejor de este año, es que ya se acabó"... pues bien, con todo y que soy un animal de cábalas, costurmbres y obsesivísimos rituales de continuidad, (además de que probablemente dicha frase ahora sera dicha por media humanidad) he de cambiar mi persectiva personal esta vez.
Este año, como todo los demás, ha traído nada más que lóbregas nubes a nuestra sociedad. Tengo que decirles cómo tengo el gozo perverso de sonreir involuntariamente mientras me preocupa la inevitable decadecia social, el ser testigo silente de cómo mi ciudad, mi país y mi gente han cabiado el resentimiento social o en el otro extremo la tranquilizante apatía por el miedo de que, el "Peligro para México" resultó ser otro. Y sólo la esperanza nos aferra al futuro.
El mundo al rededor de mi caldera mexicana no es nada alentador: los capitales se están secando y los dueños del mundo tienen tanto miedo como nosotros, pero mientras que el agua nos jala hasta el fondo, las ratas huyen despavoridas del barco con las pocas migajas que quedan, lo cual ha convertido el siguiente año en una sombra de hecatombe del que tod@s sin excepción alguna estamos termerosos... fue un año horroroso, y el próximo pinta para comernos vivos debido a la economía que se desmorona, junto con los sueños de propesperidad y patrimonio.
A pesar de que mientras estos últimos 10 días el Jack Daniels no ha dejado de fluir por mis entrañas y se hace uno con mi sangre, estoy consciente de que del otro lado del mundo un pueblo aterroriza a otro, unos cuantos chavos reviven la esperanza por el futuro y sólo a algunos kilómetros de aquí las cabezas siguen rodando...
y aun así, tendrán que perdonarme por salirme de la aldea global, pero en un arranque de egocentrismo, arrogancia y egoísmo... este año fue increíble para mí... pudo ser peor, pero la mitad del año me trajo toda la esperanza que por mucho mucho tiempo dí por perdida.
Felices fiestas a todos: que la luz llegue a tod@s ustedes y a cada una de las personas a su alrededor, que el abismo no nos trague a todos.. y de todo corazón les deseo que tengan al menos la mitad de esperazna que yo recibí en este 2008.
Año tras año desde que abrí este espacio virtual, parece inevitable que cada post de fin de año tenga la frase "lo mejor de este año, es que ya se acabó"... pues bien, con todo y que soy un animal de cábalas, costurmbres y obsesivísimos rituales de continuidad, (además de que probablemente dicha frase ahora sera dicha por media humanidad) he de cambiar mi persectiva personal esta vez.
Este año, como todo los demás, ha traído nada más que lóbregas nubes a nuestra sociedad. Tengo que decirles cómo tengo el gozo perverso de sonreir involuntariamente mientras me preocupa la inevitable decadecia social, el ser testigo silente de cómo mi ciudad, mi país y mi gente han cabiado el resentimiento social o en el otro extremo la tranquilizante apatía por el miedo de que, el "Peligro para México" resultó ser otro. Y sólo la esperanza nos aferra al futuro.
El mundo al rededor de mi caldera mexicana no es nada alentador: los capitales se están secando y los dueños del mundo tienen tanto miedo como nosotros, pero mientras que el agua nos jala hasta el fondo, las ratas huyen despavoridas del barco con las pocas migajas que quedan, lo cual ha convertido el siguiente año en una sombra de hecatombe del que tod@s sin excepción alguna estamos termerosos... fue un año horroroso, y el próximo pinta para comernos vivos debido a la economía que se desmorona, junto con los sueños de propesperidad y patrimonio.
A pesar de que mientras estos últimos 10 días el Jack Daniels no ha dejado de fluir por mis entrañas y se hace uno con mi sangre, estoy consciente de que del otro lado del mundo un pueblo aterroriza a otro, unos cuantos chavos reviven la esperanza por el futuro y sólo a algunos kilómetros de aquí las cabezas siguen rodando...
y aun así, tendrán que perdonarme por salirme de la aldea global, pero en un arranque de egocentrismo, arrogancia y egoísmo... este año fue increíble para mí... pudo ser peor, pero la mitad del año me trajo toda la esperanza que por mucho mucho tiempo dí por perdida.
Felices fiestas a todos: que la luz llegue a tod@s ustedes y a cada una de las personas a su alrededor, que el abismo no nos trague a todos.. y de todo corazón les deseo que tengan al menos la mitad de esperazna que yo recibí en este 2008.
- V